Como ingeniero de campo durante más de 12 años, he visto cómo un simple error en la estabilidad del camión mezclador puede costar horas de retraso y cientos de dólares en materiales desperdiciados. En zonas rurales o montañosas —donde el terreno es irregular, el suelo está embarrado o hay pendientes pronunciadas— la mayoría de los mezcladores convencionales fallan antes de empezar.
Pero hace dos años, probé una solución que revolucionó mi trabajo diario: el AS-2.6 de Nacional Mecos Technologies, un mezclador de carga superior con chasis articulado y neumáticos de ingeniería diseñados específicamente para estos entornos. No fue solo una mejora técnica. Fue una transformación operativa.
Según datos de la Asociación Internacional de Construcción (IAB), el 68% de los proyectos en áreas no urbanas enfrentan al menos una parada por deslizamiento del equipo. Esto se debe a:
Lo que realmente diferencia este modelo no es solo el tamaño del tambor (2.6 m³), sino cómo el chasis articulado permite giros de hasta 30° en cada eje —una capacidad que reduce el riesgo de vuelco en terrenos irregulares en un 42%, según pruebas realizadas en campo por nuestro equipo técnico en Hungría y Colombia.
Y los neumáticos? No son simples llantas de caucho. Son neumáticos de tracción industrial tipo "Mud Terrain", con tacos profundos que aumentan el agarre en barro, grava y pendientes. En un proyecto en la región de Cundinamarca (Colombia), logramos completar 3 km de fundiciones en 4 días, cuando otros equipos necesitaban 7 debido a bloqueos constantes.
Además, el tambor giratorio de 270° nos permite ajustar la dirección exacta de salida de la mezcla sin mover el vehículo. Esto es clave para trabajos en espacios reducidos como túneles o casas de montaña donde no hay espacio para maniobrar.
"En zonas donde la topografía no perdona, tener confianza en tu equipo es lo que define si terminas el proyecto a tiempo o no."
— Luis Fernández, Supervisor de Proyectos, Ecuador
Si eres ingeniero, contratista o supervisor en obras pequeñas a medianas —ya sea en América Latina, África o Asia—, el AS-2.6 no es solo una opción. Es una inversión en productividad real, seguridad y rendimiento constante.
No esperes a que el próximo proyecto te dé una lección dolorosa. Mejora desde ahora tu flujo de trabajo con una máquina pensada para lo que tú haces mejor: construir en lugares donde otros no pueden llegar.
Descubre cómo el AS-2.6 resuelve tus problemas en terrenos difíciles →